“Nunca entendemos lo poco que necesitamos de este mundo hasta que nos damos cuenta que lo hemos perdido”, J.M. Barrie. Así empezaba la temporada veintiuno de la serie Cuéntame cómo pasó de Televisión Española. Inmediatamente después muestra un hospital, médicos, e imágenes de edificios con personas aplaudiendo desde sus ventanas. Se refleja como es la sociedad española actual, incluso la presencia de la migración con banderas. Segundos después nos muestra el ficticio barrio de San Genaro, un barrio obrero madrileño o de cualquier ciudad española, que acogió a la migración de las zonas rurales en los cincuenta y sesenta, y la migración de otros países. La mítica serie de la televisión pública se adelanta 28 años a su recorrido “natural” en la ficción hasta el 2020, el año de la pandemia. El balcón de los Alcántara está reformado y los personajes tienen 28 años más. El coronavirus también llegó a esta familia que se ha encargado de transmitir una parte de la historia de España, la oficial, la de la cultura de la transición y el régimen del 78, representativa de solo una parte de los españoles y españolas.
“El año 92 fue un año muy importante, fueron las Olimpiadas y España se convirtió en la novia del mundo”, dice la nonagenaria Mercedes Fernández seguida por la sintonía del programa, interpretada esta temporada por Rozalén. Como inmigrante en Berlín no he podido visitar a mi familia y amigos en España ni en Colombia desde la navidad de 2019; se me ponen los pelos como escarpias y se me aguan los ojos como en una especie de duelo con esa canción.
Los creadores de esta histórica serie han dado en el punto clave para convertirla en un buen retrato de lo que vivió España desde 1992 como novia del mundo, hasta el 2020 cuando acabó en la UCI. El sector público ya venía tocado y enfermo de los recortes implantados por los dos grandes partidos políticos que gobernaron del 2008 al 2019. En el balcón de los Alcántara cuelga un cartel en favor de la sanidad pública, que no sabemos si está ahí desde el confinamiento y los momentos más críticos de la crisis sanitaria, o ya estaba desde los salvajes recortes iniciados por el PSOE y endurecidos por el PP.
“De esta se sale, Carlitos. Ya verás cómo tenéis a vuestro padre de vuelta”, dice envejecida Clara, mientras la ayudan a bajar de la ambulancia tras, parece ser, superar la Covid-19. La vecina es recibida con aplausos desde las ventanas y la solidaridad que parecía haber inundado el primer confinamiento. Esto muestra los momentos de esperanza que llenaron las vacías ciudades españolas con carteles de “Todo irá bien”, “Saldremos de esta”, y “resistiré”. Sin embargo, todo empezó a salir regular. La serie no nos deja contentos (ni ahora ni antes) a los sectores a la izquierda de la socialdemocracia ni mucho menos a la derecha. El discurso de Cuéntame durante estas dos décadas ha hablado desde las voces de la transición y la historia oficial del 78, como es normal, porque representa esa visión y esa parte de la historia. Por supuesto que no se le puede pedir a un programa que retrate al 100% ninguna historia. Sin embargo, sí muestra un contexto de una familia que se mudó de la España (ahora) vaciada a la gran ciudad. Con los años y mucho esfuerzo prosperó, incluso llegó a caer en la burbuja inmobiliaria en la que se convirtió este país durante muchos años. Con todo, los Alcántara no dejan de ser de clase trabajadora en un barrio obrero pero que también se creen, por momentos, la clase media de la burbuja del ladrillo a costa de endeudarse. Vivieron la movida madrileña y los años ochenta. La familia vivió en primera persona los temas de cada momento y los acontecimientos históricos más relevantes e influyentes de la historia oficial de España después del 68. Durante los veinte años de emisión, la serie ha tocado gran variedad de temas que han afectado a España: sus múltiples problemas, sentimientos históricos, nacionales, idiomáticos, sociales, políticos y culturales. Pese a no dejar contentos a la derecha ni a los sectores a la izquierda del PSOE.
De los juegos Olímpicos del 92 a la pandemia, un retrato en la pantalla más allá de Cuéntame.
La crisis económica que comenzó en 2008, tuvo su peor cara del 2013 al 2015. Las primeras en caer fueron las familias migrantes que fueron desahuciadas de sus casas por no pagar la hipoteca, los albañiles de la construcción, y así poco a poco hasta tocar a toda clase de trabajadores y trabajadoras de todos los sectores, y a pequeños y medianos comercios. España llegó a superar el 25% de paro (2012-2013). Los desahucios y las colas en las oficinas de empleo fueron las caras más visibles y dramáticas de esta crisis. Películas como Cerca de tu casa muestran ese drama y pone los pelos de punta cuando, con perspectiva, vemos el parón del 2010 cuando la selección española ganó el Mundial de Sudáfrica como se ve en la película Techo y comida. Aunque “Informe Róbinson: cuando fuimos campeones” es un muy buen y emocionante documento, me quedo con el canto de Silvia Perez Cruz dedicando su premio a los desahuciados. Otras de las películas que reflejan la dureza de esos años y habla de los primeros jóvenes que migraron al norte de Europa fue la cruda Hermosa juventud sobre la precariedad y la migración. Durante los años de la crisis económica vimos un despertar social en las calles y la situación previa al 15M la podemos ver reflejada en Y sin embargo, se mueve“ReMine, el último movimiento obrero”, “La Granja del Paso”, “¿Generación perdida?”, “Euroestafa” o el corto “Españistán (la burbuja inmobiliaria)”. Como señala esta última película, en el 2008 la crisis de las hipotecas basura de Estados Unidos explotó y contagió a todo el mundo. A finales del 2019, la segunda potencia mundial, China, tuvo el primer brote de un nuevo virus y en 2020, como todos y todas ya sabemos, se expandió por todo el planeta y trajo consigo una crisis económica brutal.
A la crisis del 2008 la ciudadanía respondió con movilizaciones. Su canalización política y real desembocó en lo que se conoció como “la nueva política”. A la izquierda del PSOE surgió Podemos, y a la derecha del PP surgió Ciudadanos. En 2020, ya sabemos que a la derecha le ha salido otro hijo de sus entrañas, VOX, una derecha que no tiene complejos de mostrarse franquista, racista, machista, homófoba, xenófoba y muy pija. Sin duda, este partido transformará de nuevo (para peor) este país, pero es Unidas Podemos, con sus altibajos, quien lo ha cambiado ya para siempre. “Política. Manual de Instrucciones” y »Alcaldesa” son los documentales más representativos de lo que significó la irrupción de lo que fue el 15M en la vida política real de este país.
Cuando llegó la pandemia
Ha pasado poco más de un año del inicio del primer estado de alarma de España y del cierre total de todo el planeta. Evidentemente, no se pueden comparar las situaciones en Europa con las de los países del sur, pero yendo a lo conocido, este ha sido un duro hachazo para la sociedad española (la que más conozco). A los mil y un errores cometidos por el Gobierno desde marzo de 2020, se sumó que la estructura social, sanitaria y de I+D (Investigación y Desarrollo) estaba ya muy tocada por la crisis financiera. Aún así, el Gobierno de coalición de España (el segundo de la democracia, el primero ya se dio en la Segunda República) no rescató primero a los bancos como lo hicieron diez años antes el PSOE y el PP en sus respectivos gobiernos en solitario. Las medidas, algunas insuficientes, sí fueron pensadas para apaciguar un poco el golpe social y económico de la crisis sanitaria. Regresando a la serie inicial, en el capítulo 378, vemos las colas del hambre. En esto y en muchos problemas sociales agravados por la pandemia, el propio Gobierno está dividido en ese equilibrio del sector monárquico, socio-liberal y que considera que la vivienda es un bien de mercado y el republicano, reformista radical y modernizador que pretendía asaltar los cielos. La dureza de lo que está significando esta nueva crisis ha sido y es conocida por todas y todos, estamos aún en medio de este drama. Aquí, sin duda, me gustaría recomendar “Vitals”, una serie documental impresionante para comprender y mostrar a los y las negacionistas por opción, no por necesidad, de lo que significa una pandemia. Es impresionante la cantidad de audiovisual creado sobre esta situación sanitaria. Quizás puedo recomendar otras dos más: la cara más divertida (aunque a veces frívola) del confinamiento la podemos ver con “Retratos con-fi-a-dos” y la más creativa y de calidad con “En casa”.
Conclusiones de una burbuja que no fue para todos y todas
España vivió su momento más “esplendoroso” del 1992 al 2008 (con un pequeño paréntesis en la crisis de los 90), formando ya parte de las instituciones de la Unión Europea, entrando al euro y todo bajo unas políticas feroces de privatizaciones iniciadas por el PSOE y terminada por el PP. Su apuesta por una política de ladrillo y por el sol, la playa y los “chiringuitos” la llevaron a vivir menos de 15 años de “esplendor” económico. Pese a que sí hubo tal crecimiento macroeconómico, no fue para todos. Este 2021, hemos visto uno de los grandes documentales de los últimos años, “El año del descubrimiento”, que nos muestra esa otra cara de lo que no se vio en las Olimpiadas de Barcelona ni en la Expo de Sevilla. Mientras un sector crecía a base de la especulación (las grandes fortunas, por supuesto), el gran impulso hacia amplias bases de la sociedad fue a costa de endeudarse con los bancos. Quienes no llegaron ni al crédito fueron invisibilizados de esa historia. Este documental nos muestra que esa burbuja no fue para todos ni todas. Las movilizaciones de Murcia (y otros territorios) por un trabajo digno y por nuestros derechos fueron engullidas por ese optimismo olímpico, europeo y por la burbuja del ladrillo. Con casi treinta años de distancia, vemos que de aquellos polvos estos lodos. Privatizamos nuestra economía y muchos derechos para poder entrar al Euro. Esta moneda nos introdujo en la Champion League de la economía mundial, pero nos quitó soberanía. Llegamos a la peor crisis económica sin esa soberanía y la salida a ésta fue dirigida desde Berlín y Bruselas. El partido más corrupto fue el que terminó de aplicar los paquetes de ajustes, que pasó la tijera por la sanidad, educación, la ciencia, servicios sociales, las pensiones y todo lo que oliera a público. Así, llegamos al segundo Gobierno de coalición de España, pero con un país enfermo y recortado, para que en 2020 ingresara en la UCI. Todo este recorrido, con sus más y sus menos, es de lo que ha hablado la serie Cuéntame y se ha completado con todas las películas nombradas, que quedan en la memoria, al menos desde el audiovisual.